Había una
vez una familia que tenía tres hijas y un hijo varón, Estaban iniciando una viaje donde una familia amiga,
que esperaba este instante para organizar y darle una solución a un problema
que ambas familias tenían
La tercera
hija, era la más apegada a sus padres, ella siempre era la primera que se ofrecía
para acompañarlos en los viajes, ese día
no era distinto, por lo que de madrugada, antes que el primer rayo de sol
saliese por el horizonte, estaban saliendo.
El viaje se
realizó en silencio, ninguno de los integrantes dijo palabra alguna, por lo cual, la niña, comenzó
a sospechar que algo malo iba a pasar, no hizo preguntas, por miedo a escuchar
las respuestas de sus padres.
Al llegar a
la casa de la familia amiga, fueron recibidos con mucha alegría, besos y
abrazos iban y venían; avanzaron al interior de la casa, donde fueron
conducidos por el dueño de casa.
Transcurrió
el día en actividades de preparación del almuerzo y luego la once. Llegando el
momento de regresar a la casa, en este instante los padres de Noe, le
comunicaron que ella se quedaría con la familia que estaban visitando. <cuna
grande fue su sorpresa y frente a esta nueva ruta que estaba tomando las cosas.
Noe quiso negarse y acompañar a sus padres de regreso pero el padre confirmo
que su decisión era que ella no vendría con ellos y que de ahora en adelante
ella se quedaría a vivir en esta nueva casa.
Las lágrimas
y la desesperación se apoderaron de Noe y no podría entender por qué estaba
sucediendo esto a ella, Sus padres se fueron dejándola sólo, a pesar de su
llanto y sudesesperación.
El vehículo
se había perdido de la vista, sólo podía ver el polvo levantado al pasar por la
polvorienta calle rural.
La angustia
y confusión de verse sola, no dio tregua a pensar; inicio caminando a paso apresurado para ir
incrementando la velocidad de sus pasos hasta llegar a correr tras el vehículo, que era conducido por su padre.
Luego de correr ferozmente, no había pensamiento alguno, sino que Noe quería
alcanzar corriendo a sus padres.
Después de
dos horas de carreta, llegó a su casa, sus padres estaban sentado uno frente al
otro, ella abrió la puerta e ingreso a su hogar y las únicas palabras que
brotaron de sus labios fueron, yo pertenezco aquí, ninguno de los padres dijo
nada.
Noe fue a su
habitación, se arrojó sobre su cama y el cansancio se hizo cargo de su cuerpo,
quedándose dormida. Ella pensaba que todo lo anterior había sido un mal sueño,
más al día siguiente se dio cuenta que lo vivido el día anterior había sido
real.
Este
incidente nunca fue aclarado, no se conversó sobre lo sucedido, no hubo una
explicación ni mucho menos una disculpa para Noe, muchos años después ella se pregunta si este momento fue el inicio de su vida o fue el cual le
proporcionó los apoyos internos paras tomar las decisiones que ella toma, de
las cuales nunca se ha arrepentido de haberlas elegido y ejecutado de esta
forma.
Noe siempre
obediente a sus padres siguió acompañándoles en sus viajes, fueron muchas las
veces al mismo lugar y ella al retornar por las tardes agradecía en silencio el
estar de regresos en su hogar, a pesar de darse cuenta que sentía un
sentimiento que ella no conocía por esta su familia.
Al cumplir
catorce años Noe, experimento una sensación de mucha felicidad, uno joven un
año mayor la pretendía, Noe no había sentido alegría en muchos años, pensó que
ese sería algo bueno y acepto ser la polola d este jovencito, por medio de un
papel escrito, confirmaba su decisión.
Un semana después de este hecho Noe y su familia fueron invitados a
celebrar el cumpleaños número ochenta y
tres y cuan sorpresa en pleno almuerzo fue interrogada por el padre del muchacho.
Las preguntas fueron respondidas
buscando muy bien las palabras, cuando se le pregunto que la relación que
mantenían con el joven estaba pensada y planificada desde hacía muchos años atrás,
con el objetivo que se cazaran, las palabras brotaron sin pensar. Si es verdad lo
que usted dice pero creo que la vida dirá si nos casamos, porque yo quiero
estudiar y soy muy joven para pensar en el matrimonio.